Este tipo de estructura de saneamiento resulta mucho más eficaz que un tanque de tormentas convencional del mismo volumen, gracias al modo de su funcionamiento; la aplicación de una válvula Vortex a una estructura de hormigón.
Es un tanque circular con entrada tangencial y por tanto el agua rota en su interior con gran velocidad, por lo que incluso los contaminantes semi-ligeros (que son los realmente difíciles de capturar) golpean contra las paredes y quedan retenidos dentro de la estructura. Gracias a su disposición y funcionamiento se puede considerar tan eficaz como un tanque de tormentas convencional del 50% más de volumen.
Una parte muy importante para el funcionamiento de estos tanques es la regulación del caudal de salida y la pantalla interior, con una forma determinada para lograr tener alivios prácticamente limpios. Además, el diseño de estos tanques debe realizarse en base a unos cálculos hidráulicos que ponen en dependencia la altura y diámetro de la estructura.
Existe la posibilidad de suministrarlo prefabricado en PRFV; de manera que se puede enviar a obra, realizarle la acometida y estar funcionando al día siguiente.
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